Nuevo Laredo, Tamaulipas.- La descarga de aguas negras al río Bravo continúa generando contaminación en el vital líquido, dijo el representante de la Sección Mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), Agustín Boone González.
Añadió que además, esta es la principal fuente de abasto para consumo humano de agua en la frontera de Nuevo Laredo.
Indicó que actualmente solo el 10 por ciento del volumen del río Bravo se considera contaminado, luego de que el líquido del también llamado río Grande es saneado por tres plantas tratadoras de aguas residuales.
“Estamos hablando que Nuevo Laredo cuenta con cerca del noventa por ciento de saneamiento de sus aguas, entonces eso ha mejorado la calidad en cuanto a años anteriores”, comentó.
Expuso que la operación de estas plantas es de excelente calidad, ya que se monitorea mensualmente con laboratorios certificados así como la calidad del agua.
Mencionó que el diez por ciento de contaminación no es para alarmarse, debido a la pequeña dimensión que es en comparación del volumen del río Bravo.
Cabe señalar que el río Bravo fue considerado como uno de los 10 afluentes más contaminados del mundo, desde el año 1994, es decir hace 22 años cuando aún no existía ninguna planta tratadora de aguas residuales.
vmp